El lunes 14 de junio sufríamos viendo la tormenta de granizo y agua que caía sobre nuestro viñedo y sobre Ollauri. Cayeron 51 litros con granizo en 40 largos minutos. Siguió lloviendo los 3 días siguientes, en total 84 litros.

Estábamos media España en alerta y en algunas municipios es impresionante ver cómo ha quedado el campo. En los teledarios salen las ciudades y asusta pero parece todo más controlable a pesar de los daños. Pero los campos quedan arrasados, y solo puedes resignarte y desear que pase pronto la nube.

Para saber el daño hay que esperar unos días pues está impracticable la viña. Aunque a simple vista ya se vé. Hay sarmientos golpeados, muchas hojas agujereadas y en el suelo, del racimo que ya estaba formado se han caído muchos granitos. Los que salgan estarán sueltos y no tan prietos como deberían estar la tempranillo.

Ahora hay que tratar con cicatrizante ecológico las heridas por rotura o golpe de los sarmientos para que no entren hongos por ahí.

Sí, ¡un desastre! tanto tiempo cuidándolas y de un día para otro perdidas..... Tenemos seguro agrario y esperaremos a los peritos que tienen estos días muchísimo trabajo pues la comarca está muy castigada.

Las otras fincas que tenemos en pueblos cercanos a la Bodega de momento han librado.

La cosecha 2020, a diferencia del año, fue buena, creemos que algo mejor que la 19. Esta 2021 no ha empezado bien y volvemos a comprobar que en la viticultura no hay nada seguro hasta que la uva no está ¡dentro de la Bodega!

Disfrutemos ahora de las cosechas que estamos cuidando con paciencia desde hace años y son grandes vinos como los Reservas 2014 o el reciente 2015.

¡Tenlo siempre a mano para cualquier ocasión imaginable!